Ejercicio de Qigong para un buen humor.

"Apoya el cielo con ambas manos"

Los movimientos suaves y amplios del brazo aumentan la capacidad pulmonar, el cuerpo recibe más oxígeno. Al mismo tiempo, el meridiano pulmonar, una trayectoria de energía que se extiende desde la clavícula en el interior de la axila hasta el pulgar, se estira y estimula.

Así es como funciona el ejercicio: Párese erguido y relajado, con los pies separados al ancho de las caderas y paralelos entre sí. Las manos en frente de la pelvis se enredan, las palmas hacia arriba, los pulgares se tocan entre sí. Al inhalar, levante las manos cerca del cuerpo hasta el nivel del esternón, con las palmas hacia arriba. Los hombros se hunden, los codos apuntan hacia afuera. Mientras exhala, gire las manos y bájelas hasta debajo del ombligo. Las palmas de las manos deben estar hacia el suelo, los codos no se estiran. Al inhalar, levante los brazos en un arco circular delante del cuerpo, los codos ligeramente doblados, las palmas se muestran al final del movimiento sobre la cabeza hacia arriba. Los brazos ahora "sostienen" el cielo: deja que los hombros se hundan, el coxis "cae" hacia el suelo. Exhale con las manos, baje los brazos hacia los lados formando un amplio arco y doble las manos delante de la pelvis nuevamente. Muévete suave y relajado, sin tensión. Repita alrededor de 4 a 8 veces.



Qi Gong sentado 20 minutos de práctica diaria (1parte) (Mayo 2024).